Los afectos en la argumentación científica: una útil perspectiva para la formación de la habilidad de argumentar

En la educación científica moderna la formación y el desarrollo de la habilidad de argumentar en los estudiantes, como en las ciencias se argumenta, son de las estrategias educativas que cuentan cada vez más, con un gran apoyo. Ello ha suscitado diversidad de investigaciones, entre las que destacan...

Full description

Bibliographic Details
Main Authors: Dení Stincer Gómez, Zuraya Monroy Nasr
Format: Article
Language:English
Published: Universidad De La Salle Bajío 2012-01-01
Series:Nova Scientia
Online Access:http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=203324394007
Description
Summary:En la educación científica moderna la formación y el desarrollo de la habilidad de argumentar en los estudiantes, como en las ciencias se argumenta, son de las estrategias educativas que cuentan cada vez más, con un gran apoyo. Ello ha suscitado diversidad de investigaciones, entre las que destacan aquellas centradas en el estudio de los mecanismos psicológicos que subyacen a esta habilidad. En ellas se ha develado el conocimiento de mecanismos de naturaleza cognitiva, metacognitiva y sociales. Sin embargo, los mecanismos de naturaleza afectiva han sido poco explorados. Tal vez por la prevalencia de la creencia de que los afectos irrumpen con la racionalidad, fundamentalmente para mal, o que no parecen cumplir un papel relevante desde el punto de vista epistemológico. Este trabajo se centra en mostrar que los afectos sí poseen importancia epistemológica en esta habilidad, tomando en cuenta importantes hipótesis y resultados empíricos que provienen de las neurociencias y de la filosofía de la ciencia. En ambas disciplinas, se defiende que procesos y operaciones cognitivas complejas, como los que están involucrados en la construcción de conocimientos científicos, y por ende, en la argumentación, están mediados e influidos por afectos como el interés, la curiosidad, el miedo, la ansiedad, la certeza, la duda, el enojo, el desánimo, entre otros. Estos afectos han sido considerados "epistémicos". Desde estas disciplinas se postula que estos afectos activan, optimizan y otorgan eficiencia cognitiva a dichos procesos e incluso, parecen aportar contenido proposicional a los enunciados que resultan del conocimiento de un objeto o fenómeno. Tanto en las neurociencias como en la filosofía de la ciencia se destaca el papel de los afectos en procesos como la toma de decisiones, la validación de inferencias, la construcción de hipótesis, el planteamiento de problemas, la evaluación de evidencias y la construcción de categorías todos ellos, bastante relacionados con los procesos cognitivos que observamos están presentes en el discurso argumentativo de las ciencias. Las reflexiones planteadas tienen importantes implicaciones en la formación de esta habilidad, en el manejo de situaciones que fomentan la argumentación, así como en la superación de las dificultades de naturaleza psicológica que obstaculizan la construcción de un buen discurso argumentativo.
ISSN:2007-0705