Patología de las cimentaciones

Este artículo se dedica a los fallos de cimentaciones intrínsecos, cuya causa está en el incorrecto diseño de la cimentación o en su defectuosa construcción. Se excluyen los fallos inducidos por operaciones constructivas en las proximidades o por los efectos de nuevas estructuras, que serán el objet...

Full description

Bibliographic Details
Main Author: Ángel Uriel Ortiz
Format: Article
Language:English
Published: Consejo Superior de Investigaciones Científicas 1983-05-01
Series:Informes de la Construccion
Online Access:http://informesdelaconstruccion.revistas.csic.es/index.php/informesdelaconstruccion/article/view/2019
Description
Summary:Este artículo se dedica a los fallos de cimentaciones intrínsecos, cuya causa está en el incorrecto diseño de la cimentación o en su defectuosa construcción. Se excluyen los fallos inducidos por operaciones constructivas en las proximidades o por los efectos de nuevas estructuras, que serán el objeto de otro artículo. Los fallos de cimentaciones son demasiado frecuentes y muy raramente pueden calificarse de inevitables. Causan daños estructurales, cuando no el colapso completo de la estructura, de difícil y costosa reparación. Provocan trastornos a los usuarios, ponen a veces en peligro sus vidas y haciendas, llegándose en ocasiones al desalojo de inmuebles y a su demolición. Las operaciones de recalce, cuando aún se está a tiempo y vale la pena salvar la estructura, son delicadas y, casi siempre, muy onerosas. Son escasos los artículos dedicados a describir casos concretos de fallos de cimentaciones y a dar cuenta de los errores cometidos, por razones obvias. La expresión fallos de cimentaciones es eufemística, pues, en la mayoría de los casos, los fallos son humanos. A menudo, se echa al terreno la culpa de la aparición de grietas en estructuras, con evidente injusticia; el terreno es inocente por completo. Achacar los daños a «vicios del suelo» (así denominados en el Art. 1.591 de nuestro Código Civil) que no ha sido posible detectar, o a fenómenos imprevisibles, sólo excepcionalmente está justificado. La lectura de tales artículos es altamente recomendable. Una buena experiencia profesional ha de estar bien nutrida del conocimiento de lo que no se debe hacer. Saber por qué mecanismos ocurren más habitualmente los fallos de cimentaciones o cuáles son sus causas más comunes es tan importante o más que una buena formación sobre los métodos de diseño y cálculo de cimentaciones. Esa experiencia puede lograrse a base de fracasos personales; pero es preferible obtenerla a través del conocimiento de los fracasos de los demás (Jiménez Salas, 1970). Este artículo se va a ilustrar con algunos ejemplos, cuyo recuerdo puede ayudar a otros a no incurrir en los mismos errores. Se pretende, así, contribuir a que la larga lista de fallos de cimentaciones crezca más lentamente.
ISSN:0020-0883
1988-3234