Summary: | Al caer el gobierno central en 1820, las ciudades-provincias tuvieron que resolver la herencia colonial y los cambios iniciados por la Revolución. En este artículo abordamos la creación y/o reforma de las principales instituciones y prácticas políticas emprendidas con el fin de alcanzar la gobernabilidad del territorio de Tucumán. Desde la bibliografía especializada y a partir de nuestras propias investigaciones analizamos el desenvolvimiento del gobernador, la emergencia de la legislatura, la reorganización de la justicia, milicias y policía, como así también, la politización del espacio público. Estas variables revelaron un orden republicano sincrético entre lo nuevo y lo viejo, en donde la apelación constante a la “emergencia” fortaleció al gobernador y antepuso el orden común a los derechos y garantías individuales.
|